¿Qué sucede al intercambiar los cables de los altavoces?
Los altavoces son el último eslabón de la cadena del sistema de audio antes de llegar a nuestros oídos. Estos sistemas convierten una actuación musical en una forma transferible que en última instancia se traduce en nuestro placer de escucha. La simple tarea de convertir la energía eléctrica de nuevo en sonido está llena de variables. Cablear de manera correcta los altavoces es una variable que puede tener un impacto importante en el sonido que percibimos.
Fundamentos de los altavoces
Los altavoces trabajan de la misma manera en que lo hacen los micrófonos dinámicos, sólo que al revés. Una bobina de alambre está unida a un diafragma o cono del altavoz, y la bobina se suspende en el campo de un imán. En un micrófono, las ondas sonoras mueven el diafragma y la bobina con ella, lo cual cambia el campo electromagnético, produciendo una pequeña carga eléctrica que representa las ondas sonoras. Esto se amplifica muchas veces antes de llegar a los altavoces. Cuando lo hace, la carga eléctrica cambia el campo magnético, moviendo la bobina del altavoz y creando sonido.
Fase
La energía del sonido actúa como una onda que tiene picos y descensos, zonas de alta y baja presión. Cuando una onda senoidal está arriba, es positiva, y cuando está abajo, es negativa. Esto corresponde con presiones altas y bajas de sonido. Cuando un cono del altavoz se mueve hacia adelante, se crea una presión positiva o alta, y cuando vuelve hacia atrás se crea una presión negativa o baja.
Polaridad
Los dos hilos de una conexión individual de altavoces tienen polaridad positiva y negativa. La señal de un amplificador se puede imaginar como la oscilación entre los cables positivos y negativos. La señal eléctrica de sonido eléctrico es como un conjunto de instrucciones para que el cono del altavoz se mueva hacia adelante o hacia atrás.
Intercambiar cables
Si cruzas o intercambias los cables del altavoz (conectar el cable negativo a la terminal positiva) el movimiento del cono del altavoz se invierte. Con un gabinete de altavoces, no notarás la diferencia. Sin embargo, cuando tienes una disposición de altavoces en estéreo con uno de los gabinetes conectado correctamente y el otro con los cables cruzados, los conos de cada uno de los altavoces se mueven en direcciones contrarias, fuera de fase. El efecto sonoro resulta en la pérdida de las señales comunes a los dos altavoces, por lo general las frecuencias bajas y con frecuencia la voz principal de una pieza musical.
