Lista de hechizos de un mago real
La magia no funciona de la manera que lo hace en las películas. "La magia es el uso de las fuerzas naturales para lograr cambios necesarios", dice el autor de Scott Cunningham Wicca. Estos cambios son sutiles, manifestándose más como parte natural de tu vida que como cambios radicales sobrenaturales. Es probable que nunca hagas flotar objetos con un movimiento de tu mano ni que hagas que las llamas de fuego broten de tus manos. Sin embargo, puedes usar la magia para cosas como protegerte de las fuerzas espirituales negativas y fomentar la buena fortuna a tu manera.
Botella de protección
Este hechizo usa la magia terrenal para la protección. Lava y seca bien una botella de vidrio, luego encuentra un terreno abierto de tierra. Raspa el césped y afloja la tierra debajo. Siéntate por unos momentos con la botella en una mano y la otra en el suelo concentrándote en el objetivo de protección. Llena la botella hasta el tope con la tierra, tápala y ponla cerca de tu puerta dentro de la casa. El elemento tierra es visto como una fuerza poderosa nutritiva que evitará que las fuerzas negativas y el mal entren en tu casa.
Poderes de concentración
La concentración es importante para cualquier tipo de magia (que también es útil para el estudio) y este hechizo te ayudará a hacerlo. Vé temprano a un campo abierto o a una playa vacía en la mañana de un día nublado. La niebla podría ser tan espesa que, tal vez, apenas podrás ver (quédate cerca de casa por razones de seguridad). Párate en la niebla y siente sus energías húmedas y espesas arremolinándose a tu alrededor. Elige un lugar en la niebla al nivel del ojo y quédate mirándolo. El objetivo es crear un agujero del tamaño de un dólar de plata que atraviese la niebla. No trates de forzar que esto suceda, simplemente relájate y enfoca tus ojos suavemente con ese propósito.
Invertir intenciones negativas
Los practicantes mágicos pueden atraer fuerzas espirituales destructivas. Para enviar estas fuerzas de nuevo a la fuente, reúne un pequeño espejo redondo, dos candelabros, una vela negra, una vela blanca, un cuchillo y fósforos. Inclina el espejo contra la pared y fija la vela negra delante de él. Coloca la vela blanca donde no esté reflejada y enciéndela, esta te protegerá durante el hechizo. Enciende la vela negra concentrándote en enviar las fuerzas negativas lejos de ti susurrando un canto como "envía el mal de vuelta", o "lleva este mal lejos de mí." Después de una hora, sofoca la vela con la hoja del cuchillo. Repite este hechizo si es necesario.
Este conjuro no es para enviar las fuerzas del mal hacia las personas que no te gustan. Se trata de devolver el mal y la negatividad al remitente solamente. El mal uso de la magia podría resultar en la mala fortuna.
Referencias
