Cómo escribir un contrato entre un Preparador Físico y un Cliente (En 3 Pasos)
Es muy importante contar con un contrato entre un entrenador y un cliente. La mayor razón para tener un contrato es para proteger el entrenador de la responsabilidad. Las lesiones de los clientes son una realidad de la vida del entrenamiento físico. El entrenador debe tener seguro de responsabilidad, pero también es importante para obtener una liberación de responsabilidad firmada por cada cliente. Esto protegerá al entrenador de la mayoría de las demandas, aunque la demanda por negligencia es la gran excepción.
Paso 1
Incluye cláusulas en el contrato que indiquen que el cliente ha tenido una reciente visita con un médico y se consideró lo suficientemente sano como para hacer ejercicio. También incluye que el cliente comprende que el ejercicio por sí implica el riesgo de lesiones o incluso la muerte. En una cláusula tiene que constar que el entrenador no es responsable en caso de que el cliente se haga una herida. Deja lugares libres para que el cliente nuevo firme cada cláusula importante.
Paso 2
Pon en un contrato separado lo que se espera del cliente y el entrenador. Una sesión de entrenamiento debe ser libre si el entrenador se demora por más de un determinado número de minutos. Una cláusula de 10 minutos es razonable. Incluye una declaración en el contrato que indique que al cliente se le cobrará por una sesión si cancela dentro de un plazo determinado. Veinticuatro horas antes de la sesión es apropiada para un nuevo entrenador, mientras que una sesión cancelada dentro de 48 horas es más apropiada para un entrenador más experimentado. Una vez más, el cliente debe firmar estas cláusulas para que no haya malos entendidos.
Paso 3
Escribe en el contrato, el importe exacto que debe aplicarse por sesión y cuando el cliente debe esperar a pagar por las sesiones. Haz que el cliente pague adelantado para un número determinado de sesiones. Esto protege al entrenador de ser pagado si el cliente cancela una sesión. Que el cliente sepa cuándo debe pagar la próxima serie de sesiones. Si el cliente decide no renovar el contrato de formación, el entrenador tendrá tiempo para encontrar un cliente para llenar ese espacio de tiempo en su horario de entrenamiento. La parte más importante de cualquier contrato es la claridad, por lo que ambas partes saben a qué atenerse. Si tienes acceso a un abogado, dile que revise el contrato para asegurarte de que cubre lo que necesita ser comunicado.