Cómo desmontar un reloj de pulsera (En 4 Pasos)
Desmontar un reloj de pulsera puede ser complicado, pero pocas personas pueden resistirse a la atracción de todos los engranajes y las ruedas. Al desmontar un reloj de pulsera perfeccionas la compleja coordinación ojo-mano y te preparas para analizar los mecanismos más complejos en el futuro. Sólo recuerda que todo tiene que volver a estar junto tarde o temprano.
Paso 1
Determina cómo está unido el reloj de pulsera. Cada reloj de este tipo tiene dos partes que han sido mecanizadas de manera precisa y se prensan para juntarlas o son sostenidas por pequeños tornillos de anteojos. Debes determinar cuál de estas dos opciones es la de tu reloj. En los tipos prensados, el reloj lucirá como una única pieza sólida. En el tipo con tornillos, notarás pequeñas cabezas de tornillos alrededor del borde en la parte trasera.
Paso 2
Remueve la parte trasera. Si hay cabezas de tornillos, simplemente toma tu juego de destornilladores de gafas, encuentra una punta que se ajuste y con cuidado remueve los tornillos. La parte trasera saldrá fácilmente y ahora estará en posición para reemplazar la batería o en algunos casos, para ajustar la velocidad en la cual viaja el marcador del tiempo del reloj.
Paso 3
Remueve la segunda capa en la parte trasera, si es que hay una. En los relojes mecanizados de ajuste estrecho, habrá una junta entre las dos mitades de la parte trasera y delantera. En el punto exacto de la junta, comienza a hacer palanca en este área suavemente con el destornillador de punta plana más pequeño que tengas en tu juego de destornilladores para gafas. Lentamente abre la junta alrededor de todo el reloj y comenzarás a ver la parte trasera separarse de la parte delantera.
Paso 4
Desarma la parte interior. Una vez que hayas expuesto la maquinaría interior del reloj, puedes observar cómo funciona o desarmarlo en pedazos pequeños. Si prefieres desarmarlo, puedes utilizar pinzas para quitar partes. O puedes hacer palanca para quitarlas con el destornillador si no te preocupa volverlo a ensamblar otro día. Si haces palanca para sacar las piezas, es poco probable que vuelvan a funcionar adecuadamente. Sin embargo, puede ser una buena experiencia de aprendizaje.