¿Cómo puedo saber si mi CPU está quemada? (En 8 Pasos)
Cuando un equipo no se enciende después de sustituir la CPU, es más probable que el problema sea un cortocircuito en la placa base que una mala CPU, pero el cortocircuito en una CPU es posible y no debe ser descartado como causa. Antes de quitar y tirar el procesador, comprueba algunas señales básicas que te dirán si la CPU está fallada o no.
Solución de problemas básicos
Paso 1
Enciende el ordenador y comprueba si todas las luces LED se encienden.
Paso 2
Escucha arrancar los ventiladores del procesador, gabinete y suministro de energía.
Paso 3
Escucha el pitido del BIOS que indica que la placa base se está iniciando. Si no escuchas este pitido, la placa base puede no estar funcionando.
Paso 4
Busca algún tipo de código publicado. Estos estarán ya sea las instrucciones de entrada del BIOS, el logotipo del fabricante o incluso un cursor parpadeante. Si recibes algún tipo de mensaje, entonces lo más probable es que tu procesador esté bien.
Paso 5
Conecta un monitor externo a la computadora si el indicador LED se enciende y los ventiladores se activan. Ninguna imagen en pantalla es signo de fallas en la tarjeta de video.
Inspecciona si hay olor a quemado
Paso 1
Desconecta la alimentación y los demás cables de la computadora de escritorio. Enciende el ordenador de modo que la parte trasera quede frente a ti. Afloja los tornillos de la parte posterior del panel lateral derecho con un destornillador Phillips. Quita el panel de la computadora.
Paso 2
Coloca la computadora hacia abajo y muévete muy cerca de la placa base para detectar un olor a quemado eléctrico cerca del ventilador del procesador. Este olor es inconfundible cuando se quema un procesador.
Paso 3
Retira el ventilador del procesador haciendo palanca hacia arriba y afuera a las lengüetas de fijación. Levanta el zócalo del procesador debajo del ventilador y olfatea para detectar un olor débil a quemado. Ya sea fuerte o débil, este olor a quemado indica una CPU fallada.