Clasificación de los microprocesadores
Los microprocesadores se clasifican basándose en diversos factores. Estos factores son diseñados para evaluar la velocidad del procesador y la cantidad de información que puede transferir. Las clasificaciones de velocidad para los microprocesadores se miden en gigahertz o megahertz, mientras que la cantidad de información que pueden transferir se mide en kilobytes o megabytes.
Velocidad
La velocidad de un procesador está clasificada en función del número de ciclos de procesamiento por segundo que genera. Estos ciclos se clasifican comúnmente en gigahertz y megahertz. 1 gigahertz equivale 1000 millones de ciclos de procesamiento por segundo, mientras que 1 megahertz equivale a 1 millón de ciclos por segundo.
Tamaño del caché
Los microprocesadores modernos contienen cachés de datos que están diseñados para almacenar información que está siendo transmitida hacia y desde el procesador. Un caché de mayor tamaño permite un acceso más rápido a las datos de uso frecuente, lo que brinda mejores velocidades de procesamiento. Los cachés se designan como caché L1, L2 o L3 y generalmente van desde 64 kilobytes hasta 1 megabyte en tamaño.
Velocidad de bus
Los procesadores también se clasifican en función de la rapidez con la cual transfieren datos entre el procesador y la placa madre. Esta clasificación es distinta a la velocidad del procesador, aunque también se mide en megahertz o gigahertz. Comúnmente conocido como el FSB (bus frontal, por sus siglas en inglés) o SB (bus de sistema, por sus siglas en inglés), esta clasificación tiene un fuerte impacto sobre la potencia global de un procesador.